Limpieza de oficinas

La limpieza de oficinas y despachos es una tarea indispensable a la hora de crear un óptimo ambiente laboral, porque una oficina limpia y ordenada, favorece un rendimiento eficaz de los empleados, disminuyendo los cuadros alérgicos, y el contagio de enfermedades comunes de carácter estacional como resfriados y gripes, al eliminar con la limpieza diaria la mayoría de los alérgenos y microbios. A la vez que evita el trasiego de empleados al servicio, para lavarse las manos, o limpiarse la ropa.

Pero esto no es todo, ya que una oficina limpia y ordenada, es la primera tarjeta de presentación ante los clientes, a los que tenemos que ofrecer una imagen impecable que trasmita calidad y excelencia en nuestro negocio.

Los titulares o responsables de despachos y oficinas, en su mayoría, son conscientes de la necesidad de mantener sus instalaciones en perfecto estado, por lo que de una forma u otra resuelven ésta necesidad, bien con personal contratado directamente para realizar el mantenimiento de limpieza, o bien delegando este servicio en alguna de las muchas empresas de limpieza profesional.

Limpieza de oficinas

Entre estas dos opciones, la primera, es decir contratar directamente el personal de limpieza, puede no ser totalmente eficaz, ya que obligará a dedicar una atención y tiempo en el seguimiento e instrucciones a algún responsable, que mientras deberá dejar aparcadas otras tareas propias de su cualificación profesional, e incluso en muchos casos también exigirá la compra de maquinaria para algunas tareas.