La limpieza de oficinas y despachos es una tarea indispensable a la hora de crear un óptimo ambiente laboral, porque una oficina limpia y ordenada, favorece un rendimiento eficaz de los empleados, disminuyendo los cuadros alérgicos, y el contagio de enfermedades comunes de carácter estacional como resfriados y gripes, al eliminar con la limpieza diaria la mayoría de los alérgenos y microbios. A la vez que evita el trasiego de empleados al servicio, para lavarse las manos, o limpiarse la ropa.
Pero esto no es todo, ya que una oficina limpia y ordenada, es la primera tarjeta de presentación ante los clientes, a los que tenemos que ofrecer una imagen impecable que trasmita calidad y excelencia en nuestro negocio.
Los titulares o responsables de despachos y oficinas, en su mayoría, son conscientes de la necesidad de mantener sus instalaciones en perfecto estado, por lo que de una forma u otra resuelven ésta necesidad, bien con personal contratado directamente para realizar el mantenimiento de limpieza, o bien delegando este servicio en alguna de las muchas empresas de limpieza profesional.
![Limpieza de oficinas](img/servicios/img9.jpg)
Entre estas dos opciones, la primera, es decir contratar directamente el personal de limpieza, puede no ser totalmente eficaz, ya que obligará a dedicar una atención y tiempo en el seguimiento e instrucciones a algún responsable, que mientras deberá dejar aparcadas otras tareas propias de su cualificación profesional, e incluso en muchos casos también exigirá la compra de maquinaria para algunas tareas.